Como ya lo hemos advertido en ocasiones anteriores, nuestro cuerpo es en su mayor parte agua. Nada más y nada menos que en un 60%. Por ello no es de extrañar que el líquido elemento sea indispensable a la hora de alimentarnos. De hecho, después del aire, es la segunda urgencia de nuestra vida. Si nos privan de ella, nuestra supervivencia no irá más allá de unos pocos días de atroz sufrimiento. Algunos de sus beneficios más importantes son:
✔ Alimenta de forma permanente a nuestras células.
✔ Contribuye a estabilizar la concentración de los diferentes componente de la sangre.
✔ Permite la eliminación de los desechos de nuestro cuerpo.
✔ Mantiene el cuerpo en una temperatura constante.
Basta que nuestro cuerpo pierda un 10% para que el funcionamiento de nuestro órganos vitales se vea amenazado de muerte. Pero no quiero asustarte, sólo llamarte la atención sobre la importancia del agua y no sólo de beber, sino también de consumir productos que la contengan. Porque nosotros la conocemos en su forma más simple, en botella o corriendo por el grifo, pero también está presente no sólo en todas las bebidas frías o calientes, sino también en un buen número de alimentos, como frutas y legumbres.
Para un adulto, el consumo recomendado es entre 2 y 2,5 litros de agua por día, a repartir entre bebida y contenida en alimentos. De hecho, lo mejor es no esperar a tener sed para beber y acostumbrarse a tomar pequeñas cantidades durante todo el día. ¡Y no hablemos ya si hacemos deporte! Por esta y muchas razones más, el agua es reconocido como el alimento más importante del ser humano.
– Pollo (73%)
– Pescado (62% a 81%)
– Huevos (75%)
– Carne de Res (56% a 70%)
– Aguacate, platano (78% a 80%)
– Patata, boniato (78%)
– Manzana, pera, naranja, kiwi (80% a 85%)
– Lechuga, judías verdes (90% a 95%)
– Tomate, fresa, frambuesa (90% a 95%)
– Berenjena, calabacín (90%)
– Melón, sandía (95%)
– Harina (15%)
– Pan (25% a 30%)
– Pan de molde (33% a 38%)
– Biscote (5%)
– Cereales en grano (4% a 8%)
– Cereales en desayuno (2%)
– Mantequilla y margarina (16% a 20%)
– Crema (30% a 40%)
– Quesos (32% a 55%).
