Los músculos juegan un papel muy importante en el peso del cuerpo humano por ser uno de los principales agentes consumidores de energía. Además, son los actores y los receptor primordial del entrenamiento teniendo en cuenta que gracias a ellos se hace realidad todo lo referido a los movimientos de traslación, tanto conscientes como inconscientes, que tu cuerpo realiza a lo largo del día.
No obstante, antes de seguir adelante conviene acabar con una idea errónea. Y es que, al hablar de músculo, uno de inmediato se imagina a alguien grande que sube a un escenario y empieza a hacer posturitas y alardear de sus bíceps o levantar 300 kilos de pesas. No se trata de eso, ni de culturismo ni de halterofilia, aunque por supuesto ambas disciplinas impliquen el trabajo con el músculo y la primera de ellas entrene única y exclusivamente para ganar más masa muscular.
Lo que tiene que quedarte claro es que todos tenemos el mismo número de músculos y la misma composición muscular, por eso debes olvidar que esos músculos sean patrimonio de unos cuantos que se pasan el día en el gimnasio para desarrollarlos a fin de presumir de ellos. Tal vez sea por la imagen que tenemos del culturismo que la palabra músculo asusta un poco. Pero eso es quedarse en la superficie, pues el músculo cumple muchas funciones vitales para todos y cada uno de nosotros, y ninguna de ellas está relacionada con el culturismo.
✔ El movimiento.
✔ Junto con los huesos, mantener la posición erguida y estable del cuerpo.
✔ La producción de calor, pues al realizar contracciones musculares se origina fuente calórica.
✔ La protección para el buen funcionamiento de los órganos vitales.
En ese orden de ideas, la función del músculo no estriba sólo en permitirnos levantar pesas. Están ahí y nuestra misión es sacarles el máximo partido posible. Es más, un buen sistema muscular te va a aportar un sinnúmero de beneficios, entre otros los siguientes:
✔ Equilibrio corporal y estético.
✔ Aumento del metabolismo basal, con reacciones químicas necesarias para mantener el cuerpo vivo en estado de reposo.
✔ Descarga de las articulaciones, con los músculos ayudando al esqueleto a soportar el peso del cuerpo.
✔ Reducción del tejido adiposo o grasa.