Hacer el amor es una de las maneras más placenteras para quemar calorías. Como toda actividad física, independiente de la intensidad o la duración, requiere de cierta cantidad de energía para poder realizarse. Es más, en algunos casos, pueden asemejarse a un ejercicio leve-moderado.
Al respecto, la Sociedad Internacional de Medicina Sexual, habla de una media de entre 200 y 400 calorías por encuentro sexual. Sin embargo, recientes estudios señalan que las cifras oscilan entre las 100 y las 69, dependiendo de una serie de factores tanto internos como externos.
Tener un rol más activo durante las relaciones, ser hombre o mujer, la duración del acto, el peso, la edad y el estado de forma influirán, indudablemente, en el gasto calórico. Así, por ejemplo, los jóvenes quemarían más calorías que los mayores al hacer el amor porque, por normal general, son más vigorosos. Según el sexólogo Jesús Rodríguez, la media de edad en la que se quemarían más calorías durante el sexo estaría en torno a los 25 años.
En cuanto a las diferencias entre hombres y mujeres, la realidad es que ellos gastan más energía que ellas. Según un estudio publicado en la revista digital ‘Plos One’, los hombres gastan 100 Kcal, mientras que las mujeres queman 69 Kcal, durante un encuentro.
Los autores señalan que, por cada minuto de relaciones, el hombre consume de media 4.2 Kcal, y las mujeres 3.1 Kcal. La explicación a esto puede estar determinada por el peso. Normalmente, los hombres pesan más que las mujeres por lo que necesitan más calorías para realizar el mismo ejercicio.
Si la práctica sexual implica una intensidad de ejercicio superior al de caminar a 4,8 km/h, pero inferior al de trotar a 8 km/h, y si el tiempo estimado está sobre los 6 minutos, habría que tener relaciones sexuales a diario para que la pérdida de calorías fuera significativa, en comparación con una actividad física leve-moderada, como dar un paseo en bicicleta o caminar una hora.
Y esto es así porque durante las relaciones se puede llegar a trabajar todos los músculos; eso sí, en función de la postura que se tenga y la intensidad. Lo que está claro es que la musculatura de la espalda y de la cadera son las más utilizadas durante los encuentros íntimos.
Por otra parte, para el mencionado estudio, se pidió a las parejas tener un total de 4 encuentros durante un mes y, a la vez, realizaron ejercicio en la cinta rodante durante 30 minutos, para comparar una actividad con otra, en términos de esfuerzo físico.
Los resultados arrojaron que, solo el 5% de todos los participantes informaron que hacer el amor era más extenuante que hacer ejercicio. El 19% de ellos señaló que estaban muy fatigados y el 7% informó un gran gasto de energía después de la actividad sexual.
Aproximadamente el 98% de todos los participantes informaron que la actividad sexual era más placentera que ejercitarse en la caminadora; el 81% informó un alto nivel de placer personal y 79% informó un alto nivel de placer de su pareja después del encuentro.
Finalmente, vale la pena recordar que, numerosos estudios han demostrado que tener relaciones de 2 a 4 veces a la semana tiene otros beneficios como mejorar el estado de ánimo o reducir el estrés. Durante el acto liberemos una serie de hormonas que nos suben la autoestima y que reducen los síntomas de ansiedad y depresión.