Para convertir en realidad la representación motora existe un solo procedimiento: intentar reproducirla prácticamente. Esto se consigue por diferentes métodos, procedimientos y metodologías que elevan la efectividad del aprendizaje.
El papel más importante está a cargo de los métodos de la enseñanza del ejercicio en su conjunto (método del ejercicio integro) y por partes (método del ejercicio desmembrado).
MÉTODO DEL EJERCICIO INTEGRO
Permite formar los más correctos hábitos motores, de conformidad con las particularidades individuales del alumno. Este método se utiliza, ampliamente para la enseñanza de las técnicas más difíciles. Con este fin, las técnicas deportivas difíciles se simplifican de forma que la esencia de la acción en cuestión se mantenga inmutable.
Por ejemplo: lo fundamental en los lanzamientos es la salida del implemento. Independientemente del lugar desde donde haya sido realizado un lanzamiento, se mantiene su misma esencia. Sólo se modifica la complejidad de la acción. Con la realización del ejercicio en la forma más simplificada comienza el aprendizaje.
La ulterior y gradual complicación permite completar el ejercicio. De acuerdo a las particularidades de la técnica en cada deporte se establecen ejercicios que se complican gradualmente.
MÉTODO DEL EJERCICIO DESMEBRADO
Se utiliza a fin de enseñar, corregir, perfeccionar y fijar determinadas partes y elementos del todo. En este caso se detiene la realización de acciones totales y, el alumno, durante algún tiempo, se dedica a efectuar determinado elemento para perfeccionarlo. Una vez que ha sido bien fijado se liga a la acción total.
Para ello el alumno realiza, nuevamente, la acción de conjunto prestando atención a la reproducción de aquel detalle que fue perfeccionado. Debe tenerse presente que los detalles fijados por separado sólo pueden unirse al todo con facilidad cuando la estructura fundamental no cambia.
MÁS CARACTERÍSTICAS DE LOS MÉTODOS
El método del ejercicio desmembrado y el método del ejercicio total se complementan entre sí, pues están íntimamente interrelacionados.
En el proceso de la enseñanza práctica de la realización de ejercicios se aplican distintos procedimientos y métodos que permiten realizarlos por vez primera, así como corregir los errores. En la base de todo esto se encuentra la intención de facilitar las condiciones de realización de los ejercicios.
Es útil realizar lentamente un ejercicio cuando toman parte el entrenador y su alumno. Este procedimiento se utiliza también al desmembrar los ejercicios en movimientos realizados en secuencia.
Tienen especial interés los llamados ejercicios imitativos, que reproducen las acciones en su totalidad o algunas de sus partes bajo condiciones más fáciles. Estos ejercicios deben ser realizados con gran imaginación, como en las condiciones normales.
El camino práctico fundamental es el de realizar los movimientos sin aplicar todas las fuerzas (aunque en la zona de movilidad de los hábitos) y, gradualmente, en el curso del aprendizaje, pasar a realizarlos con todas las fuerzas.
Para eliminar las tensiones innecesarias se pueden cerrar los ojos durante algunos segundos cuando se realizan los ejercicios. Uno de los modos más efectivos para enseñar el relajamiento es la realización de ejercicios alternando sus intensidades.
En todos los métodos señalados, en los modos y procedimientos, lo fundamental es la repetición del ejercicio estudiado. El fin fundamental de las repeticiones es la mejor realización posible del ejercicio. Sobre el principio de la repetición se estructura, fundamental, la metodología de la enseñanza de la técnica deportiva.
Finalmente, tiene una gran significación la repetición de los ejercicios en el juego, sobre todo en las actividades con los jóvenes deportistas.