En el entrenamiento de la fuerza no existen los atajos. Si quieres tener músculos grandes y definidos debes seguir un camino largo de disciplina y esfuerzo.
En lo que si te puedes apoyar es en las ayudas que con el pasar de los años nos ha traído la tecnología. Hoy en día existen diferentes métodos que te ayudarán a obtener mayores resultados en menor tiempo.
Una de estas tendencias que puede ser de gran ayuda es la Crioterapia, un método que complementa la perdida de peso y ganancia de definición. Utiliza esta técnica como complemento y sácale provecho a la bomba de hormonas que liberará tu cuerpo.
La Crioterapia fue desarrollada en el Medio Oriente, se dice que nació en el continente asiático, particularmente en Japón en 1978 gracias al doctor Yamaguchi, quien la desarrolló para tratar a sus pacientes de forma integral.
La forma en que se hace es, en resumidas cuentas, un frío generado por una nube de vapor de nitrógeno que llega a una temperatura de -180 grados centígrados entre 1 a 3 minutos.
Cuando el cerebro recibe el golpe de frío, el hipotálamo libera una serie de sustancias al sistema neurológico entre las que se encuentran Dopamina, Serotonina, Alfa y Beta Endorfinas, aumento del flujo sanguíneo, aumento en la producción de enzimas catalizadoras radicales libres, disminución de liberación de citocinas inflamatorias y aumento de la lipolisis.
Es decir, que se genera una bomba de estímulos al cuerpo que ayuda a que podamos mejorar de forma sustancial y no sólo para perder grasa.
La mayoría de las personas recurren a este tratamiento para poder perder grasa en las zonas en donde está más localizada. Además, se ha comprobado que la crioterapia ayuda a mejorar enfermedades crónicas de la piel. Esto se debe al aumento del flujo sanguíneo debido a la vasodilatación periférica aumentada que acarrea una gran cantidad de oxigeno en el cuerpo.
Adicional a lo antes mencionado, los expertos explican que los benéficos que ofrecen las sesiones de crioterapia son muy variados, algunos de los más importantes son:
– Mejora la circulación sanguínea.
– Reduce la inflamación.
– Disminuye el estrés y la ansiedad.
– Acelera el metabolismo y genera un boost de energía, ya que aumenta el gasto calórico de entre 500 y 800 kilocalorías por sesión de 3 minutos.
– Reduce la hinchazón en la parte baja del abdomen, lo que provoca que eliminas la grasa en esta zona.
– Disminuye considerablemente la molesta celulitis, lo que le da una apariencia de juventud a tu cuerpo.
– Tonifica los tejidos y evita la flacidez, permitiendo que tu cuerpo se mantenga firme en todo momento.
– Desvanece la grasa localizada, esto gracias a que se aplica de manera personalizada en las diferentes zonas del cuerpo.
Por lo tanto, los beneficios son variados y si quieres sacarle provecho a estas terapias tendrás que realizar como mínimo 5 sesiones a lo largo del tiempo que te indiquen en donde decidas realizarlas.
Es conclusión, la crioterapia es un paso extra a la visita con tu nutricionista y al hacer ejercicio constantemente. Es importante resaltar que hacer uso de este método es una excelente opción para bajar de peso, pero siempre es recomendable hacer actividad física conjunta, para que puedas aprovechar al máximo todos los beneficios.